6.1. Raíces Comunes

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6.1. Raíces Comunes

En vista de que esta obra tiene como propósito tender puentes, antes de discutir las supuestas diferencias teológicas con la tradición judeocristiana, sería beneficioso resaltar algunas de sus importantes similitudes.

El Islám comparte las mismas raíces históricas que el Judaísmo y el Cristianismo. Sus antecedentes se hallan en el patriarca Abraham, pues su primera esposa, Sarah, al ver que no podía tener hijos, le ofreció su sirvienta egipcia, Hagar, con quien engendró a Ismael. Cuando posteriormente Sarah tuvo un hijo propio, Isaac, Abraham llevó a Ismael y Hagar al valle de Beca (Meca) en el desierto de Arabia, a fin de salvarles de los celos de Sarah e Ismael.

Fue entonces que Abraham e Ismael visitaron el sitio sagrado de la piedra negra que inicialmente había servido de altar para Adán. La piedra había quedado enterrada durante el diluvio en el tiempo de Noé, así que la excavaron y construyeron la Kaaba (el Cubo) como santuario y lugar de peregrinaje. Poco a poco el pueblo fue olvidando las enseñanzas de Abraham y cayendo en la "Edad de la Ignorancia", hasta la llegada de Muhammad en el siglo VII AD, cuando la Kaaba se encontraba llena de ídolos. Muhammad los tiró al suelo, convirtiendo la Kaaba nuevamente en lugar sagrado y de peregrinaje para sus seguidores.

Los 12 hijos de Ismael fueron los patriarcas de las 12 tribus de Arabia, mientras que los 12 hijos de Israel, hijo de Isaac, se convirtieron en los patriarcas de las 12 tribus del pueblo Hebreo. Como resultado, en la Arabia del tiempo de Muhammad, aún existían grupos de seguidores de Abraham llamados los "Hanif", quienes constituían una minoría monoteísta entre la mayoría politeísta.

Es interesante notar que cuando Muhammad comenzó a llamar a la gente hacia la creencia en un solo Dios, sus coterráneos supusieron que les pedía volver hacia la antigua religión de Abraham. Cosa que no negó Muhammad, explicando que el Islám no era una nueva religión, sino el retorno al mismo camino eterno y progresivo que habían enseñado Abraham, Moisés y Jesús.

Lastimosamente, la rivalidad inicial entre los medio hermanos Ismael e Isaac se fue aumentando con el tiempo, siendo propagada de generación en generación, resultando en el actual odio entre los hermanos pueblos árabes e israelitas.

2 comentarios:

Sonia Alexandra Villamil Figueroa dijo...

Falta la cita donde dice que Mohammad intenta hacer volver a la religión de Abraham, Moisés y Jesús. Es una contradicción, porque de ser así, en la actualidad creerían en Jesús, el Mesías que cumplió con las profesías del antiguo testamento y no tendrían otro libro sagrado aparte de la biblia.

Peter C. Newton-Evans dijo...

Gracias, Sonia, por tu comentario tan reflexivo. Se resuelve la aparente contradicción si se considera que la revelación histórica de la voluntad de Diós ha sido progresiva, no estática. Del mismo modo, Jesús reafirmó la verdad de Abraham y Moisés, y dijo que no había venido a destruir la ley de Moisés, sino cumplirla. Sin embargo, los seguidores de Cristo no lo consideran una contradicción el hecho de no tener al Antiguo Testamento como único libro sagrado. Del mismo modo, los seguidores de Muhammad reconocen el origen divino de las enseñanzas de Abraham, Moisés y Jesús, pero agregan la revelación de Muhammad a esa lista. Finalmente, puedes referirte a la sección 5.5 - Referencias Bíblicas al Islám para conocer algunas profesías sobre Muhammad.